Thermal Management System (TMS) es un sistema que enfría o calienta las baterías de los vehículos eléctricos en función de las condiciones atmosféricas y de funcionamiento, con el fin de mantener un rango de temperatura óptimo para su funcionamiento. El TMS es parte del sistema de gestión de batería más grande llamado BMS (Battery Management System), que es responsable de controlar los parámetros de la batería (carga, voltaje, temperatura, etc.).
El TMS es un componente crucial para garantizar la funcionalidad y la durabilidad de las baterías de los vehículos eléctricos porque generan calor durante el funcionamiento, especialmente durante la carga rápida o cuando están sujetos a altas demandas de energía. El exceso de calor puede afectar negativamente el rendimiento, la seguridad y la vida útil de la batería. Un sistema de gestión térmica eficaz puede ayudar a aumentar la eficiencia energética del vehículo y prolongar la vida útil de la batería. Además, el control preciso de la temperatura puede mejorar el rendimiento general del vehículo eléctrico, lo que permite una autonomía más amplia y una carga más rápida